Un idioma en la maleta
Todos nos centramos, en estos últimos años de crisis, en aprender idiomas con el fin de encontrar trabajo o prosperar en él. Esto es cierto pero,
¿Es esta la única utilidad que tienen los idiomas?
En este artículo os vamos a exponer las diversas razones por las que un idioma sería nuestra primera opción a la hora de hacer una maleta de viaje.
¿Cuántas veces has sentido que no te atreves a visitar un sitio por el simple hecho de no conocer el idioma? Existen sitios preciosos que nos perdemos por este miedo: Japón, Noruega, Dubai, Pekín… Sitios exóticos que, no necesariamente precisan de aprender el dialecto autóctono. El mismo inglés podría abrirnos las puertas de estos paraísos terrenales.
¡Aprender un idioma expande vuestros horizontes! Ya no te tendrás que preocupar por: ¿Y si no me aclaro para preguntar una dirección? ¿Me estarán tomando el pelo en el hotel? ¿Qué pone en este cartel? Son preocupaciones totalmente normales que tienen solución. Además, y que sirva de motivante extra, esta nueva habilidad te permitirá disfrutar de miles de películas y series en su versión original, infinitamente mejor, pero de eso hablaremos en otro artículo.
Como tu ya sabes, el inglés es el idioma universal. Podrías ir a cualquier lugar del mundo con este idioma y la gente os entenderá. Por eso es tan importante conocerlo, estudiarlo y disfrutarlo, mucho más allá de la simple utilidad de aumentar nuestro curriculum y nuestras opciones de encontrar un empleo. Sin embargo, esto no quiere decir que no podamos ir más lejos. Perfectamente podemos lanzarnos a la aventura y estudiar directamente el idioma autóctono. Siempre le dará un «plus» al viaje saber noruego para moverte por las frías pero bellas calles de Oslo, o perfeccionar tu mandarín para recorrer sin tapujos la Gran Muralla China.
Esperamos haber despertado tu curiosidad y transmitirte la misma pasión que sentimos nosotros por los idiomas. ¡Desde «Interland» te proponemos este nuevo reto!
1- Elige cualquier país del mundo como objetivo a medio plazo
2- Busca ese idioma que te facilite la estancia
3- Lánzate a aprender dicho idioma