Muchas veces pensamos, ¿Por qué no inventan un idioma para que todos tengamos que aprenderlo? Así, todos partiríamos desde las mismas condiciones e, idiomas como el inglés, no tendrían las ventajas que ahora tienen al no tener que aprender nada.
Pues este idioma ya existe, y no es nuevo. Este idioma es el Esperanto.
Se trata de la lengua planificada internacional más difundida y hablada en el mundo. El nombre proviene del seudónimo que L. L. Zamenhof usó para publicar las bases del idioma en 1887. Su intención fue crear una lengua fácil de aprender y neutral, más adecuada para la comunicación internacional.
Como quedó recogido en la Declaración de Boulogne, el objetivo del esperanto no es reemplazar los idiomas nacionales. Esta lengua es simplemente una alternativa internacional rápida de aprender frente a las grandes lenguas que surgen según las potencias de la época y suponen un elevado coste en recursos e igualdad lingüística para las naciones no nativas.
La verdad es que su éxito no fue del todo grande. Son pocos los sitios donde puedes encontrar a alguien que imparta clases de dicho idioma, y ningún estado la posee como lengua oficial. Sin embargo, pese a la dificultad de encontrarlos, cuenta con más de 2.000.000 de conocedores de la misma.
En la actualidad, el esperanto es una lengua diaria que se utiliza en viajes, correspondencia, redes sociales, chats, reuniones internacionales e intercambios culturales, negocios, proyectos, asociaciones, congresos, debates científicos, en creación de literatura tanto original como traducida, en teatro y cine, música, así como radio y a veces televisión.
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Feliz semana.
